Caça Social

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jueves, 3 de agosto de 2017

La paloma torcaz se ha convertido en una plaga que amenaza las viñas

El adelanto de la vendimia no es el único fenómeno que experimenta en los últimos años el sector vinícola de las Pitiusas. La producción de uvas se está viendo gravemente afectada por la población de paloma torcaz, «que se ha convertido en un plaga», según admite el director insular de Agricultura, Vicent Tur.

«Es una plaga terrible, se ha comido la mitad de la uva que tenemos en es Cubells y ha arrasado por completo algunas parcelas pequeñas que tenemos junto al bosque», lamenta David Lorenzo, de Ibizkus. En el caso de Terramoll, en Formentera, el año pasado, la paloma torcaz también arrasó «1.500 de kilos de uva, el 5% del total de la cosecha, pero, en las parcelas cerca del bosque, más del 60% de la cosecha». 

«La paloma torcaz venía a criar en invierno y se iba en verano, pero hace cinco años se empezó a quedar y ahora afecta mucho a las viñas y los olivos, sobre todo si están cerca de pinares, que es donde viven», explica Tur. Con el fin de controlar su población, el Consell de Ibiza ha ampliado el periodo de caza de torcaces en dos semanas este año, mientras que el año pasado ya añadió otros 15 días. Así, si hasta 2015 sólo se podían cazar estas aves del 15 de agosto a mediados de septiembre, ahora el periodo abarca del 22 de julio a finales de septiembre (salvo los lunes, miércoles y viernes). 

Además, el Consell también ha encargado una «asistencia técnica para el análisis de los métodos y actuaciones de control de las palomas», anunció ayer Vicent Tur. Este informe ya ha empezado a elaborarse y debería entregarse a final de verano «para servir de herramienta con la que combatir esta plaga».

Fuente La Vanguardia

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